Ha pasado un año desde que se decretó el primer confinamiento. Muchos nos hemos visto en la situación de tener que cambiar la visión que teníamos de lo que hasta ahora llamábamos hogar. Nuestra vivienda, ha pasado a llamarse, en muy poco tiempo, oficina, parque de juegos, restaurante incluso en algunos casos ha llegado a ser un resort de vacaciones. Es muy importante que aprendamos a poder separar cada momento del día para que todos estos espacios no se fusionen y podamos seguir teniendo el concepto de identidad de nuestro hogar.
Hace poco, leí un estudio realizado por el Instituto de Investigación de la Felicidad de Copenhague, el “Happiness Research Institute”. Su director ejecutivo, Meik Wiking, padre de la tendencia “hygge”, habla de un estilo de vida lleno de satisfacción, cuyo principal objetivo es encontrar la calidez en nuestra alma.
Virginia, ¿qué tiene que ver eso con la decoración de nuestra casa?
Pues bien, esta tendencia está estrechamente relacionada con el hecho de descubrir lo que hace que nuestra casa sea nuestro hogar, con indentificar qué hace que nuestro hogar nos haga sentir esta calidez en nuestra alma cada vez que nos adentramos en alguna estancia de nuestra vivienda.
Por ello, muchas veces me comentais que quereis conseguir que vuestra casa tenga personalidad, que sea vuestro refugio de todo lo que pasa ahí fuera. De ahí el blog de este mes, os animo encarecidamente a que creeis esos rincones especiales a lo largo y ancho de vuestro hogar, bien sea para leer un libro tranquilamente o donde poder sentaros a relajaros tras un largo día.
Porque desde que nuestro hogar se convirtió a la fuerza en oficina, pasamos muchas horas en el mismo espacio y por ello debemos mantener la esencia de nuestro refugio llamado hogar. Animaos a jugar, a crear, a convertir vuestro espacio de trabajo en una zona armónica con velas y plantas que aporten calidez y comodidad. Buscad todo eso que os gusta, que da personalidad a vuestra vivienda y trasladarlo a vuestro rincón de trabajo.
La felicidad que sentimos cuando hablamos de nuestro hogar, se ve impulsada por 5 necesidades emocionales fundamentales: orgullo, comodidad, identidad, seguridad y control. De este modo y totalmente de acuerdo con Wiking, “las casas grandes no equivalen a una gran felicidad”. Rompe ese mito doméstico, olvídate del tamaño de tu hogar y céntrate en cómo te sientes cuando estás en casa.
Llena tu hogar de emociones creando rincones que te trasladen a ellas.
2 Comentarios
Me parece un blog fundamental , necesario y preciso, para orientar a alcanzar un estado de bien estar y felicidad en tu propio espacio.
Enhorabuena.
Muchas gracias por tu comentario Francisco. Ponemos todo nuestro cariño y profesionalidad en crear y ayudar a las personas a crear espacios únicos.